viernes, 13 de julio de 2012

299 años de la firma del Tratado de Utrecht: 299 años de infamia


Alegoría del Tratado de Utrecht, obra de Paolo de Matteis.

Tal día como hoy, 13 de julio de 1713, se ponía fin al conflicto europeo de la llamada Guerra de Sucesión a la Corona de España entre los partidarios del legítimo (por testamento de Carlos II) rey Felipe V y los llamados austracistas, partidarios de archiduque Carlos (Carlos III), hijo segundogénito del emperador Leopoldo I.

El Tratado de Utrecht, que supondría la base del equilibrio europeo de la siguiente centuria, también implicó la desmembración europea de la Monarquía Hispánica (pérdida de los territorios italianos y flamencos), que pasaría ahora a ser una monarquía exclusivamente atlántica. Sin embargo, el golpe más duro y humillante de este tratado, negociado a espaldas del Rey Católico por Francia e Inglaterra y posteriormente impuesto al mismo, fue (sin contar la pérdida de Menorca) la aceptación del dominio inglés sobre el Peñón de Gibraltar (invadido en 1704 por una flota anglo-holandesa al mando del comandante Rooke y el Príncipe de Hesse, últime virrey de Cataluña nombrado por Carlos II y primo de la reina viuda doña Mariana de Neoburgo).

El punto X de Tratado de Utrecht rezaba:

"El Rey Católico, por sí y por sus herederos y sucesores, cede por este Tratado a la Corona de la Gran Bretaña la plena y entera propiedad de la ciudad y castillos de Gibraltar, juntamente con su puerto, defensas y fortalezas que le pertenecen, dando la dicha propiedad absolutamente para que la tenga y goce con entero derecho y para siempre, sin excepción ni impedimento alguno. Pero, para evitar cualquiera abusos y fraudes en la introducción de las mercaderías, quiere el Rey Católico, y supone que así se ha de entender, que la dicha propiedad se ceda a la Gran Bretaña sin jurisdicción alguna territorial y sin comunicación alguna abierta con el país circunvecino por parte de tierra. Y como la comunicación por mar con la costa de España no puede estar abierta y segura en todos los tiempos, y de aquí puede resultar que los soldados de la guarnición de Gibraltar y los vecinos de aquella ciudad se ven reducidos a grandes angustias, siendo la mente del Rey Católico sólo impedir, como queda dicho más arriba, la introducción fraudulenta de mercaderías por la vía de tierra, se ha acordado que en estos casos se pueda comprar a dinero de contado en tierra de España circunvencina la provisión y demás cosas necesarias para el uso de las tropas del presidio, de los vecinos y de las naves surtas en el puerto.

Pero si se aprehendieran algunas mercaderías introducidas por Gibraltar, ya para permuta de víveres o ya para otro fin, se adjudicarán al fisco y presentada queja de esta contravención del presente Tratado serán castigados severamente los culpados. Y su Majestad Británica, a instancia del Rey Católico consiente y conviene en que no se permita por motivo alguno que judíos ni moros habiten ni tengan domicilio en la dicha ciudad de Gibraltar, ni se dé entrada ni acogida a las naves de guerra moras en el puerto de aquella Ciudad, con lo que se puede cortar la comunicación de España a Ceuta, o ser infestadas las costas españolas por el corso de los moros. Y como hay tratados de amistad, libertad y frecuencia de comericio entre los ingleses y algunas regiones de la costa de Africa, ha de entederse siempre que no se puede negar la entrada en el puerto de Gibraltar a los moros y sus naves que sólo vienen a comerciar. Promete también Su Majestad la Reina de Gran Bretaña que a los habitadores de la dicha Ciudad de Gibraltar se les concederá el uso libre de la Religión Católica Romana. Si en algún tiempo a la Corona de la Gran Bretaña le pareciere conveniente dar, vender, enajenar de cualquier modo la propiedad de la dicha Ciudad de Gibraltar, se ha convenido y concordado por este Tratado que se dará a la Corona de España la primera acción antes que a otros para redimirla".

Desde esa fecha, las infamias y violaciones de este punto del Tratado de Utrecht por parte de Gran Bretaña han sido continuas, así como su negativa descolonizar el territorio de acuerdo a las resoluciones de la ONU 2231 de 1966 y 2353 de 1967.

Os invito a uniros a la llamada Iniciativa 13-7-13 que pretende poner fin, en su 300 aniversario, a la última colonia del mundo Occidental, un reducto del pasado en una Unión Europea que pretende mirar al futuro: http://iniciativa13713.wordpress.com/

POR UN SIGLO XXI SIN COLONIALISMO.

7 comentarios:

  1. Me parece una gran iniciativa, Alberto, y por una España no colonizada.
    Saludos ¡¡¡

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Javier me alegra que te haya gustado esta iniciativa tan positiva.

      Un abrazo amigo.

      Eliminar
  2. La última colonia de Europa la tenemos en España y como ahora nuestro país no vale un maravedí es el momento de atacar y tocarnos más las narices. Somos una colonia dirigida económica y políticamente desde el exterior, y esta es una realidad patente de la cual nos avergonzamos ahora y nos avergonzaremos en el futuro.
    Un besito y feliz verano
    P.D. Creo que ya sé en qué publicación podemos publicar nuestro artículo. Verá la luz el año que viene, en formato digital y en una publicaciónh dependiente de la Universidad de Salamanca. Cuando lo tenga todo ultimado te cuento

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Carmen llevamos casi 300 años con la misma cantinela, es inaceptable que la última potencia de Europa este en territorio de una de las grandes economías y países de la UE y la zona euro (pese a todos los problemas) y que la parte invasora sea precisamente uno de los países más euroescépticos...es hora de dar un golpe en la mesa porque la restructuración de España debe ser económica y también territorial (recuperación de Gibraltar y reinvención o eliminación de la CCAA).

      Un beso.

      PD: me alegra enormemente lo que me comentas de nuestro artículo.

      Eliminar
  3. Buena iniciativa Alberto, me ha encantado el cuadro alegórico del Tratato de Utrech donde quien está abajo sosteniendo todo el lienzo es el linense o habitante de la ciudad frontera de La Línea de la Concepción. Hay otras figuras alegóricas igualmente interesantes.
    http://lalineaygibraltar.blogspot.com

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Francisco gracias por el apunte sobre el cuadro elegórico.

      Un saludo y me paso por tu blog.

      Eliminar
  4. Todos los gobiernos han defendido que Gibraltar debe volver a España, ya que es inaceptable que haya una colonia en Europa, pero pintamos poco o nada en el panorama internacional y el estrecho es un punto estratégico que Gran Bretaña no va a soltar; si el estrecho de Gibraltar no fuera zona de paso de navíos de guerra y fuéramos una potencia mundial nos lo devolverían como pasó con la devolución a China de Hong Kong.
    Un saludo.

    ResponderEliminar